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Se acaba la “paz narca” impuesta por López Obrador en Tabasco; el CJNG manda sicarios a pelear e incendiar la plaza que estaría controlada por un grupo en el que se identifican a policías estatales de Morena

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Por Bonifacio Zamacona

La aparente paz que se vivía en Tabasco fue rota en las últimas horas cuando un grupo de criminales, aparentemente del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG) irrumpió en la entidad generando caos y secuestrando y ejecutando al menos a tres policías en el municipio de Huimanguillo.

Desde hace varios años, la entidad de donde es originario el presidente Andrés Manuel López Obrador se tranquilizó al parecer como parte de un acuerdo de los grupos criminales de no estorbarse entre ellos y respetar los negocios de cada uno, sobre todo el tráfico de drogas y el negocio con migrantes centroamericanos.

Sin embargo, todo se trastocó con el cambio de comandante de la 30 Zona Militar. El sábado 4 de febrero de 2023 tomó protesta como nuevo Comandante el general de Brigada Diplomado de Estado Mayor, Héctor Francisco Morán González, quien vino a suplir al general Cristóbal Lozano Mosqueda.

Al general que dejó en aquella fecha la zona militar ubicada en la capital de Tabasco, se le responsabiliza en círculos políticos de la filtración de que el entonces gobernador Adán Augusto López Hernández habría puesto como director de Seguridad Pública estatal, por recomendación de grupos criminales, al policía de carrera Hernán Bermúdez Requena. Quizá por ello a su despedida no acudió el gobernador interino, Carlos Manuel Merino Campos.

La recepción al nuevo jefe de la plaza no fue benévola. El 3 de abril de 2023 un convoy que lo trasladaba fue atacado con armas de fuego en el municipio de Juárez, Chiapas, cuando realizaba inspecciones, resultando dos soldados muertos.

Aunque se informó de varias personas resultaron heridas, así como de dos soldados muertos, el gobierno de Tabasco operó para que no se supiera que el atentado habría sido en contra del mismísimo comandante de la 30 Zona Militar quien lejos de mantener la línea seguida por su antecesor, se plegó a las políticas estatales de “control” de la seguridad, un proceso que ahora se encuentra roto.

Y es que en las últimas horas, se han registrado diversos eventos con la marca característica de enfrentamientos entre dos grupos criminales. Al parecer, el CJNG quiere tener el control de la plaza tabasqueña que ahora se encuentra en poder de lideres de un grupo denominado La Línea, en el que se involucra a policías estatales.

El primer mensaje de esta ofensiva criminal fue crear caos en carreteras de Cárdenas y Huimanguillo, cometiendo asaltos e incendiando vehiculos particulares, pero al mismo tiempo, secuestraron a al menos tres policias, a dos de los cuales ejecutaron y desmembraron. Dejaron sus cuerpos abandonados con amenazas a los “mugrosos policías estatales” que según el CJNG son los que controlan la actividad criminal en la tierra de López Obrador.

Parece que lo que se avecina son días de guerra y de violencia. Mientras tanto, la Zona Militar, la Guardia Nacional y Seguridad Pública del estado enviaron a 300 elementos al municipio de Huimanguillo, que es la zona más caliente de la disputa criminal, por asentarse en esa zona varias rutas de tráfico de drogas, de migrantes y de huachicol.

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