Viernes negro para el tirano: López Obrador queda como mentiroso; acusó a Xóchitl Gálvez de recibir 1,400 mdp en contratos pero la información privada que le entregó Hacienda llega apenas a 80 millones
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Por Pedro Esteban Roganto | @RogantoPedre
Si los mexicanos fuéramos gente de honor, en apenas dos horas con veinticuatro minutos de este viernes 14 de julio de 2023 pudimos haber conocido la renuncia de un presidente mentiroso y muy seguramente se pudo haber definido la elección presidencial de 2024 a favor de la oposición.
Pero en las redes sociales todo es virtual, menos, claro, las violaciones a la ley y las mentiras.
Todo ocurrió así:
1. Molesto por la decisión del INE de ordenarle que respete los derechos políticos de la senadora Xóchitl Gálvez, a quien ha atacado durante casi dos semanas seguidas desde Palacio Nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador lanzó su resto: dijo que mientras lo notificaban, iba a lanzar su golpe final, y lo hizo: acusó a la hidalguense de haber recibido 1,400 millones de pesos en contratos públicos y privados, un señalamiento que viniendo de la boca de alguien que ha hecho de su lucha contra la “mafia del poder” su plataforma de vida, sugeriría algún tipo –cualquiera– de corrupción.
2. La reacción de la aspirante presidencial de la oposición fue inmediata. “Me está confundiendo con su prima Felipa (Obrador, a la que Pemex le ha dado en este sexenio más de 900 mdp en contratos)”, dijo de bote pronto y también se lanzó a matar: “si él me demuestra que yo tengo contratos por mil 400 millones, renuncio hoy a la candidatura a la aspiración presidencial del Frente Amplio y si no, que renuncie a la presidencia por mentiroso”.
3. Las redes sociales y los medios de comunicación destacaron a partir de las 10 de la mañana el encontronazo entre los representantes, López Obrador del poder y Xóchitl de la oposición, una pelea dispareja como de Goliat contra David.
4. Pero a las 12.04 horas, ahora sabemos que sin leerlos, el presidente López Obrador quiso poner en la guillotina a la senadora Gálvez sin saber que estaba en realidad poniendo en la navaja su propio dolor de cabeza. Fue en ese momento cuando el presidente publicó un tuit que para sus seguidores era “demoledor”: “Esta es la información que recibí sobre contratos de Xóchitl Gálvez por alrededor de 1,400 millones de pesos en nueve años, y que estoy enviando al señor Claudio X. González para su análisis y verificación. Además, él puede ampliar la información, con sus investigadores, y hacer la denuncia legal correspondiente”.
5. Pero 144 minutos después, a las 2 de la tarde con 28 minutos, después de revisar la documentación presentada por el presidente, apareció Xóchitl en su papel de David y derrumbó la autoridad moral de este Goliat del pantano: “acaba de hacer un perro oso”, le dijo, palabras más, palabras menos. Y es que la senadora y su equipo se dedicó a cotejar y a sumar la información presentada por el mandatario. “Dijo que mi empresa recibió más de mil 400 mdp del gobierno y según su propio documento no llegan ni a 80”. Todavía más, también le dijo que “ni contar sabe”.
6. En su tuit con el que hundió al tirano, Xóchitl le deja claro al presidente lo que todos sabemos: “que está usando todo el aparato del Estado para investigarme dolosamente por mi aspiración. Sígale, no le tengo miedo, no hay nada que ocultar”.
7. Otro punto a destacar en el mensaje de la aspirante presidencial es que el presidente López Obrador ha violado con esto una serie de leyes “y, por ello, procederé legalmente contra usted y quien resulte responsable”.
8. En su tuit que exhibe como mentiroso al presidente (motivo suficiente para que un hombre de honor renuncie), Xóchitl Gálvez le habla a la sociedad mexicana y sobre todo a aquellos que temen por el rumbo al que lleva al país la obsesión política de AMLO. “Ha dejado claro que le molestan las empresas formales y que ahora hasta de los negocios entre empresas quiere opinar. Confirma que prefiere las empresas patito de los elevadores del IMSS, los contratos de su prima Felipa, los sobres amarillos de sus hermanos y las casas prestadas a su familia”.
9. Finalmente, la senadora rubrica el viernes negro del tirano. “Conmigo se topó con pared porque quien nada debe, nada teme. En el fondo lo único que demuestra es que no le gustan las personas que aspiramos a algo mejor, le molesta la superación personal y el progreso social. Lo bueno es que ya se va”.
