Por su política de austeridad, el gobierno de López Obrador ha dejado de construir escuelas, ya no contrata maestros y no tiene planes frente a la deserción escolar de 1.6 millones de alumnos
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A pesar que es un sector clave para el desarrollo, la administración de Andrés Manuel López Obrador no ha tenido como prioridad a la educación y ya hay registros oficiales que indican el estancamiento de docentes y escuelas públicas, así como la reducción del número de alumnos.
La asociación civil México Evalúa revela en su portal web que de enero a junio de 2023, el gasto dedicado a la educación pública ascendió a 419 mmdp, un aumento de 10.7% (41 mmdp) frente a 2022, pero una cifra inferior en 3.4% (15 mil millones de pesos) frente a 2018 o 10.7% (50 mmdp) menor frente al máximo de 2015.
De hecho, apunta el organismo, no ha habido un avance en este gasto en todo el sexenio.
En descargo de la 4T, la asociación señala que el descuido del gasto educativo se ha venido arrastrando desde el sexenio pasado. Al 2T de 2018 el gasto enfocado a educación fue 5% (23 mmdp) menor al de 2012, último año de Calderón. Es decir, con Peña Nieto hubo un avance nulo fiscalmente hablando en educación.
Por la tendencia observada, es posible que tampoco se logre un avance en la actual gestión, destaca el reporte.
En el analisis titulado “Cinco riesgos de finanzas públicas al segundo btrimestre de 2023”, se explica que la mayor parte del gasto educativo este sexenio se concentra en dos ramos: las Aportaciones Federales, con 52% del, gasto promedio, y la SEP, con 42%.
En el caso de las Aportaciones Federales en materia educativa, se reportó oficialmente, de enero a junio de este año, un gasto de 220 mil 600 millones de pesos, que es 3% más que el año pasado pero 6% menos que en el mismo período del 2018, mientras que la SEP informó de un gasto de 191 mil millones, 22 por ciento más que en 2022, pero sólo 3% por arriba de 2018.
Es importante destacar que de acuerdo al repoprte, el incremento del gasto de la SEP se dio principalmente en subsidios, con 125 mil 600 millones de pesos, 6.3% más que en el 2018, debido a la expansión de los programas de becas de educación básica y media, así como “Jóvenes construyendo el futuro”.
Para compensar esos incrementos, se ha recurrido a los recortes, como el que se decidió a los Apoyos a Centros y Organizaciones de Educació, que acumularon un gasto de 3.6 mmdp al 2T de 2023, 60% (5.4 mmdp) menos frente a 2018.
En el caso de los Subsidios para Organismos Descentralizados Estatales (universidades estatales) se les asignaron 56.8 mmdp, 6% (3.3 mmdp) menos que al cierre del sexenio de Peña Nieto.
Otras modalidades del gasto en educación que han sido ‘sacrificadas’ han sido las orientadas a inversión, evaluación y mejora a la eficiencia. Los proyectos de inversión han sufrido un recorte de 90% (409 mmdp) frente al cierre del sexenio; el gasto para evaluación de políticas públicas, de 56% (1.2 mmdp) y el gasto para mejorar la eficiencia, 10% (1.1 mmdp).
Otro tema destacable de la reducción del gasto educativo, es el de la nómina de docentes e inversión física, decisiones que han tenido un claro impacto en el desarrollo de capacidades educativas.
En 2022 el número de docentes en el Sistema Educativo Público Ascendió a 1.62 millones, el mismo nivel al cierre del sexenio pasado. Por su parte, el número de escuelas en 2022 se estima que cerró en 216 mil, el mismo nivel de 2018. No obstante, el número de estudiantes cayó a 29.9 millones, cuando al cierre del sexenio pasado el número de inscritos fue de 31.5 millones: México Evalúa
Para decirlo claro, destaca el organismo, la apuesta por favorecer programas de subsidios de transferencias directas no se ha traducido en un incremento en el número de estudiantes en el país, pero sí ha significado un retroceso en la dotación de recursos destinados al pago de profesores, construcción de infraestructura, evaluación y mejora continua.