Morena pretende radicalizarse el próximo sexenio incorporando a los tres poderes de la Unión un asambleísmo demagógico estilo Venezuela llamado “poder popular”, advierte Roberto Madrazo
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El denominado “Proyecto de Nación 2024-2030” del partido Morena es una ruta que pretende radicalizar la “Cuarta Transformación” con medidas que representan una seria amenaza de alejarnos de los límites constitucionales existentes en el país, advirtió el ex gobernador Roberto Madrazo.
El activista opositor, que fuera uno de los primeros y más longevos adversarios del actual presidente de la república, a quien le ganó la gubernatura tabasqueña en 1994, señala que lo que Morena quiere incluso, es convocar a un “Congreso Constituyente” con el objetivo de conformar un “nuevo poder popular” con rango constitucional, independiente del poder ejecutivo, legislativo y judicial.
“Con el pretexto de defender los intereses del pueblo, podrá someterse a consulta del nuevo poder popular cualquier ocurrencia, como el sistema de gobierno, la materia electoral, la política criminal, el sistema financiero, el gasto público, etc., sin que existan los límites que hoy prevé la Constitución para la Consulta Popular”, advierte el también ex candidato presidencial en su cuenta de Twitter.
Añade que además, el proyecto de radicalización incluye una inversión multimillonaria en #telecomunicaciones, para producir contenido en medios de comunicación digitales y tradicionales, con el propósito de movilizar a las masas hacia la causa política del hoy presidente.
“La continuidad de la Cuarta Transformación amenaza con conducirnos a un sistema de gobierno alejado de los límites constitucionales que hoy conocemos. La idea de un régimen autoritario o socialista, es cada vez más posible”, resalta en su mensaje.
En los documentos que adjunta en su tuit, se lle que el nuevo “poder popular” que plantean los morenistas además de otro poder como el Ejecutivo, el Judicial y el Legislativo, tendría “facultades plenas para ejercer acciones en defensa de los intereses del pueblo”.
En el documento, se destaca que lo que quiere la 4T es que “el poder popular” quede reconocido en la carta magna para “revertir y reparar el daño de las reformas constitucionales neoliberales, antisociales (sic) y antiecológicas de las últimas décadas”.
