NacionalPolítica

EL FALSO ORIGEN DE SHEINBAUM: La madre de la candidata de Morena no es mexicana; Etcétera presenta las evidencias

Visitas: 623

PRIMERA PARTE

La madre de Claudia Sheinbaum, la doctora Annie Pardo Semo, no nació en México, puesto que llegó al país a los diez años de edad, tal como demuestran documentos obtenidos por etcétera en Estados Unidos y México.

Una investigación acuciosa realizada por etcétera demuestra con evidencias sólidas que la reconocida científica, madre de la candidata presidencial, no nació en México, en contradicción con lo que la morenista ha dicho, en el sentido de que sus dos padres son mexicanos.

Esta investigación analiza documentos migratorios y del registro civil y compone una clara línea temporal que evidencia que Annie Pardo nació en 1940 en Bulgaria y que fue hasta 1950 que se documentó su presencia en México.

Asimismo, esta investigación demuestra que, contrariamente a la épica familiar construida por Sheinbaum, su familia materna no llegó a México huyendo de la Segunda Guerra Mundial, ya que su salida de Bulgaria tuvo lugar en 1946, y el conflicto terminó en mayo de 1945, un año después de que el conflicto terminara. Antes de asentarse en nuestro país, su familia vivió un tiempo en los Estados Unidos a donde llegaron el 27 de mayo de 1946.

En 2018, el medio Enlace Judío publicó un video de Sheinbaum grabado en un encuentro con la comunidad judía. Ante los presentes, ella declaró: “Yo crecí con mis padres, mi padre y mi madre ya nacidos en México, crecí en realidad sin religión, así me educaron mis padres. Pero evidentemente la cultura se trae en la sangre.”

“Soy 100% mexicana, orgullosamente hija de padres mexicanos”, dijo, ante los abundantes rumores que la señalaban de ser extranjera o hija de padres extranjeros. En efecto, en ese momento no había evidencias reales en sentido opuesto, aunque en redes sociales las sospechas siempre estuvieron presentes.

Es hasta ahora, gracias a esta investigación realizada en varios países, que se cuenta con evidencias de que la jefa de gobierno mintió sobre el origen de su madre, con la obvia intención de evitar críticas en un país que recela de las personas de origen extranjero y en el que, lamentablemente, pervive un acendrado antisemitismo, que etcétera reprueba tajantemente.

La mentira también provino de parte de la propia doctora Pardo, a quien, habida cuenta de su perfil público, difícilmente podría favorecerle relatar que su registro en el país fue irregular y que no es nacida mexicana,

En otras palabras: en esta investigación se demuestra que Sheinbaum dio más importancia a sus aspiraciones políticas que a decir la verdad sobre su familia. Y la doctora Pardo, lo mismo, quien hizo una exitosa carrera en la UNAM y el año pasado recibió el Premio Nacional de Ciencias.

La metodología de la investigación

etcétera indagó el origen familiar de la candidata de Morena a la presidencia acudiendo a buscadores internacionales para la construcción de árboles genealógicos, los cuales han brindado datos importantes y sobre todo, confiables.

Los datos provienen de actas de nacimiento, actas de defunción, fichas de migración y listas de migrantes contenidas en archivos históricos de los gobiernos de Estados Unidos y México.

A la par, se realizaron búsquedas en archivos de la comunidad judía tanto en Bulgaria como en otros países de Europa, que cuentan con datos sobre la diáspora sefardí, grupo al que pertenecen los apellidos Pardo y Cemo, de la madre de Claudia Sheinbaum. Aunque los sefardíes provienen de la península ibérica, se ha documentado su presencia en Bulgaria y en muchos otros países, toda vez que en varias ocasiones fueron expulsados de los territorios de la ahora España.

Presentamos fotografías de listas de migración, fichas migratorias y actas de registro civil.

Annie Pardo Cemo: los datos duros

La madre de Claudia Sheinbaum cuenta con un acta de nacimiento elaborada en México, en el entonces Distrito Federal, ahora Ciudad de México. Dicho documento asienta que la niña Annie Pardo Cemo es hija de José Pardo y de Mati Magdalena Cemo y que nació el 6 de junio de 1940 en la capital mexicana.

La fecha de registro es el 31 de diciembre de 1940. Sin embargo, hay otros datos que contradicen el nacimiento de Annie en suelo mexicano y apuntan a una falsificación del acta de nacimiento, algo muy frecuente en aquellos años (tanto entre mexicanos como extranjeros) por una multitud de motivos.

Veamos esos datos.

– Manifiesto migratorio en Estados Unidos

El manifiesto de pasajeros extranjeros a los Estados Unidos elaborado por el Servicio de Inmigración y Naturalización Departamento de Justicia de aquel país, con fecha 27 de mayo de 1946, asienta que en el transatlántico “Uruguay” llegaron al puerto de Nueva York un grupo de pasajeros que abordaron en el puerto Le Havre, en Francia.

En los números 6, 7 y 8 de la lista se anotan los siguientes nombres: Josiff Pardo, Mazalmadlen Pardo y Anni Pardo. Se anota que tienen 34, 23 y 6 años, respectivamente. (Posteriormente Josiff y Mazalmadlen castellanizaron sus nombres como José y Mati Magdalena).

Se anota también que Mazalmadlen y Anni son “esposa e hija” de Jossif y que viajan con la visa TR.V.#29, emitida en Jerusalén el 24 de abril de 1946. Su última residencia fue la ciudad de Tel-Aviv. Se aclara, con un sello, que son pasajeros “en tránsito”, es decir, que no cuentan con residencia en el país.

¿Cómo se explica que a la familia Pardo Cemo se le hubiera dado una visa en Jerusalén en el año 1946 si, según la historia oficial de Claudia y su madre la familia llegó a México en 1940?

– Ficha migratoria norteamericana

Una semana después de su llegada a Nueva York, a José Pardo se le elaboró una escueta ficha migratoria en donde se confirman los datos asentados en el manifiesto de pasajeros del trasatlántico “Uruguay”. La ficha fue elaborada por el Departamento de Justicia de Estados Unidos.

Se confirma su edad, su nacionalidad, que está acompañado de su esposa, de 23 años de edad y de su hija, de 6 años de edad. La fecha del documento es 6 de abril de 1946.

Es evidente que si la familia ya fuera residente de México la ficha norteamericana lo asentaría con claridad, pero no fue así.

– Ficha migratoria mexicana

En aquellos años (20, 30, 40 y 40), el Servicio de Migración del Departamento de Migración del gobierno mexicano emitía a los extranjeros tarjetas de identificación migratoria, con fotografía, huella, firma y datos generales, incluidos “raza” y religión.

En el Archivo General de la Nación fue posible encontrar una tarjeta a nombre de José Pardo Benjaminoff, padre de Annie Pardo Cemo, con fecha 12 de enero de 1950. En esta tarjeta se asienta que José Pardo es de nacionalidad búlgara, nacido en el año 1913, casado y de profesión comerciante. No se localizaron fichas anteriores a ese año a nombre de Josiff o José.

Ello apunta claramente a que el año de llegada de los Pardo Cemo a México fue 1950 y no 1940, año del nacimiento de la madre de Claudia.

De quien sí hay fichas previas son de los abuelos de Annie (bisabuelos de Claudia): Esther Calev Azaria, Jacques Semo Bedjet y de su hermano, Henri Semo Calev, todos nacidos en Bulgaria. Estas fichas son de 1946.

– Acta de matrimonio de los abuelos de Claudia

El acta de matrimonio entre los padres de Annie Pardo dice que el enlace entre José y Mati fue verificado en México en noviembre de 1950, cuando la niña tenía ya diez años de edad.

Diez meses antes, en enero de ese año, en su ficha migratoria, José declaró ser casado. Era falso, su estado civil era unión libre, al menos ante las leyes mexicanas. Si ellos estaban casados en otro país, no lo sabemos.

En dicha acta los contrayentes declaran tener dos hijas y solicitan al Estado mexicano que las legitimen como sus descendientes.

Como extranjeros en México, necesitados de garantías legales, no se explica que los abuelos de Claudia hubieran vivido diez años en el país sin estar casados, considerando que la falta del contrato civil ponía a sus dos hijas en indefensión en una época que los “hijos naturales” y más si eran hijos de extranjeros carecían de los mismos derechos que los hijos “legítimos”.

Es más coherente pensar que se casaron ante el Estado mexicano el mismo año en que llegaron al país y luego de obtener permiso de residir y trabajar. Es claro también que la segunda hija del matrimonio, Esther, hermana de Annie, nació en Estados Unidos.

El origen de las especulaciones

Durante varios años en redes sociales ha circulado la supuesta “prueba” de que Claudia Sheinbaum falsificó su acta de nacimiento y que ello sería evidencia de que es extranjera. (MÁS DETALLES EN LA TERCERA PARTE DE NUESTRA INVESTIGACIÓN QUE SE PUBLICARÁ EL DOMINGO)

La supuesta evidencia no es más que la versión digital de su acta de nacimiento, generada por el sistema del Registro Civil en línea que dice que el lugar de nacimiento de Claudia Sheinbaum es “Ciudad de México” y no, como era en 1962 (año en que nació), el Distrito Federal.

La capital del país cambió oficialmente de nombre en el año 2015, de Distrito Federal a Ciudad de México, por lo que todos los capitalinos nacidos antes de esa fecha nacieron son “defeños”.

Pero pruebe el lector a generar su acta de nacimiento en línea: si usted nació en la capital antes de 2015, el sistema asentará que usted nació en la Ciudad de México, pues es el nombre oficial actual. Ese detalle para nada es prueba de una falsificación. Para probar algo así se deben  tener elementos realmente sólidos.

Lo que queda demostrado en este artículo es que Annie Pardo Cemo y sus padres no pudieron estar en México antes de 1950 por lo que mucho menos estaban aquí en 1940, año de nacimiento de la madre de Claudia. Ante la solidez de las evidencias de su migración a Estados Unidos en 1946 y de su internamiento en México hasta 1950, salta a la vista que un acta de nacimiento fechada en 1940 es producto de la falsificación, algo que incluso hoy, con los controles tecnológicos vigentes, es frecuente y relativamente sencillo de hacer.

No se trata de juzgar las acciones de un matrimonio que en aquellos difíciles tiempos tomaron decisiones complicadas.  Desde el punto de vista de una familia de migrantes judíos de mediados del siglo pasado es comprensible que hayan acudido a todos los recursos necesarios para proteger su estancia en el país y así facilitar la vida de sus hijos y nietos, así como la prosperidad de sus negocios, sobre todo tomando en cuenta el detestable antisemitismo que recorría el mundo.

Cosas semejantes y mucho más tuvieron que hacer inmigrantes de todas las nacionalidades para ponerse a salvo en años en que la xenofobia estaba mucho más extendida que hoy en la sociedad mexicana.

Pero es algo muy distinto que, 74 años después, una aspirante a la presidencia que se precia de ser honesta, íntegra y transparente, no cuente a plenitud los altibajos de su vida familiar, sobre todo cuando ha usado dicha historia familiar para adornar su imagen pública.  De esta manipulación no está exenta, por supuesto, la propia Annie Pardo Cemo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *