Simpatizantes de la 4T defienden elecciones venezolanas y critican a Boric por pedir transparencia
Visitas: 2
Varios de los farsantes de la cuarta transformación aprovecharon la elección presidencial de Venezuela para hacer su profesión de fe chavista al defender los dudosos comicios que, según el órgano electoral del gobierno, dieron la “victoria” a Nicolás Maduro para un tercer periodo en el poder, además de que atacaron a Gabriel Boric, presidente chileno, por pedir transparencia en el conteo de votos.
En medio de la disputa por los resultados de los comicios del domingo, sobre todo por la tardanza en dar los resultados y en la falta de certeza de estos debido a que el Consejo Nacional Electoral de Venezuela no ha publicado las actas, en México, sin ninguna duda, el chavismo-madurismo de buena parte del oficialismo salió a relucir.
En esa defensa del dictador Maduro destacó el monero Rafael Barajas, El Fisgón, alguien que en México casi siempre ha dudado de la autoridad electoral, lo que no aplicó el domingo y el lunes con la de Venezuela. Así, se lanzó al vacío al declarar el triunfo “incontrovertible” de Maduro, clamar que no hay pruebas de fraude, además de que “el sistema electoral venezolano está blindado”.
El director del Instituto Nacional de Formación Política (INFP) de Morena incluyó entre “los derrotados” por el madurismo no sólo a “la derecha venezolana” y al “aparato mediático dominante”, sino también a Gabriel Boric, presidente de Chile, al que calificó como “queda bien (sic) del sistema”.
El gran pecado de Boric para el chavismo mexicano es exigir transparencia en el conteo de votos en las elecciones venezolanas. Eso zahirió a Barajas, quien denunció que el mandatario izquierdista toma “partido” por los asesinos de Salvador Allende, quien “se revuelca en su tumba” al leer el tuit del chileno, al que, además y ya rabioso, acusó de “servilismo”.
Antes de ello, El Fisgón reprodujo un mensaje de Delcy Rodríguez, vicepresidenta de Venezuela, contra el mandatario chileno, en el que la funcionaria chavista puso a Boric “a la derecha del criminal @JMilei y sirva la mesa al extremismo regional tan servil y con tan poca vergüenza. Venezuela se respeta!!!”.
Indignado por la simple transparencia en el conteo de votos, que fue la petición de Boric, Barajas se dio vuelo al reproducir las felicitaciones del dictador cubano Miguel Díaz-Canel, y desde Bolivia las de los colegas enemigos Luis Arce y Evo Morales, además de la de Vladimir Putin. Además, el INFP de Morena felicitó a Maduro, lo que ni siquiera hizo el partido desde su cuenta.
La senadora Citlalli Hernández defendió el sistema electoral de Venezuela y se pronunció por el aislacionismo: “No sabía que Venezuela era colonia del mundo. Políticos de diversos países sin el mínimo respaldo popular opinan y exigen como si tuvieran algo que ver. Esperemos a conocer la voluntad popular del pueblo venezolano y dejemos de meternos en los asuntos electorales de otros países con la agenda marcada por parte de la derecha más perversa del Continente”.
Después acusó que esa “derecha continental” se organizó para tratar de influir, mediante las redes sociales, en la elección venezolana, y hacia las 10 de la noche incluso abrió uno de sus tuit para “leer con seriedad a todas esas voces mexicanas que están haciendo el ridículo mezclando sus fobias y afirmando que en #Venezuela hubo fraude. Me interesa saber. Pendiente de sus datos duros”. Ella no dio ninguno de lo que afirmó, pero sí se los pidió a los demás.
La secretaria general de Morena también embistió contra Boric al comentar el tuit del mandatario chileno sobre la transparencia de las actas y del proceso electoral: “No sabía que era venezolano, presidente”.
A su vez, Jorge Gómez Naredo, que regentea Polemón y Regeneración, enmarcó la disputa en la campaña de la derecha para decir que las elecciones fueron, y le acusó de inventar mentiras porque “no pueden ganar y el pueblo los rechaza”, por lo que ha obtenido una nueva derrota en “la tierra de Hugo Chávez”.
Dejó ver su naturaleza autoritaria al colocar en otro tuit una fotografía con una imagen en la que se ve juntos a Chávez y a Fidel Castro con el siguiente mensaje: “Estos dos hombres marcaron la ruta para hacer de América Latina un lugar de justicia, equidad y solidaridad. Hoy su legado sigue vivo, latiendo y lleno de esperanza y energía”.
El farsante tapatío declaró ganador a Maduro, fue “contundente” e “inobjetable”, según él, mientras que la “derecha latinoamericana” sólo “gastó millones” para hacer creer que el dictador había perdido.
En la misma onda de El Fisgón, también se lanzó contra el presidente chileno y su humilde solicitud: “Lo que son las cosas: Gabriel Boric, con su progresismo buena ondita, resultó ser más igual a Javier Milei que a Salvador Allende”.
El que reconoció el avance de la oposición venezolana fue Abraham Mendieta, y también que no fue un buen resultado para el chavismo, aun cuando su referencia eran los datos oficiales del organismo electoral alineado con el chavismo.
Dentro del conocido guion de parte de la izquierda latinoamericana, Mendieta alertó contra un llamado que, según él, hizo “la extrema derecha argentina” para un golpe de Estado en Venezuela aun antes de que se dieran a conocer los resultados.
También lanzó reproches a Boric, faltaba más: le acusó de tener doble vara para medir ya que este lunes se reunió con Emiratos Árabes, y le cuestionó si para estos no tenía ningún cuestionamiento. Suponemos que allá, en el Medio Oriente, también tuvieron elecciones el pasado domingo.
Luego, Mendieta halló la razón de la demanda de Boric: que la preocupación de Chile (“bello, país tan querido”) no está preocupado por la democracia venezolana, sino, ni más ni menos, “por los millones de venezolanos que hay en tu territorio, y que sufren diariamente el racismo de una parte importante de tu gente trabajadora. No nos hagamos trampas al solitario”.
Sin embargo, tramposo que es, Mendieta no explica por qué los venezolanos han tenido que salir de su país y trasladarse a Chile a sufrir el muy reprobable racismo, además de que no hay cifras que muestren que son “millones”, pero tenía que ponerle amarillismo al asunto y apantallar a los incautos.
El autor de la “Rayuela” de La Jornada se sumó a la tarascada contra Boric: “Lo de ayer fue penoso. Casi toda América Latina, encabezada por Boric, sumándose a la cruzada de EU contra Venezuela”.
Esa pequeña muestra de farsantes nos da buena idea de la fe chavista que tienen amplios sectores del morenismo, lo que no es un buen signo para México.
